La justicia en Estados Unidos

LAS CORTES Y LOS JUECES. La Corte Suprema de Justicia es el máximo organismo judicial de la nación , pero también cada estado tiene su propia corte, además a los juzgados se les denomina cortes y en ellas operan jueces individuales o en grupo, según el caso, los hay federales, estatales, distritales, de condado, etc...

Físicamente las cortes son pequeñas salas en donde los jueces resuelven diariamente numerosos casos de toda índole.

JURADO DE CONCIENCIA. El sistema judicial norteamericano tiene instituído el jurado de conciencia. Son grupos de ciudadanos, generalmente doce (pueden ser más o menos), con sus respectivos suplentes, que se encargan de escuchar y estudiar casos criminales para decidir la culpabilidad o inocencia de un individuo o entidad.

Son nombrados para ejercer esta obligación ciudadanos registrados previamente para votar.

JUICIOS MENORES. Como lo hemos mencionado, cada estado se da sus propias leyes pero hay reglas que se cumplen a nivel nacional. Los juicios menores son para aquellas personas que reclaman casos de menor cuantía y a quienes se les permite representarse así mismos para evadir los costos de abogado.

JUICIOS DE TRANSITO. Cuando un policía detiene a una persona por una infracción de tránsito, es común que le haga una citación a corte. O si la persona cree que no ha cometido la violación, puede pedirle al mismo policía que desea ir a corte.

Una vez allí, el juez decidirá su culpabildad o inocencia y confrontará su versión con la del policía. Para defenderse el ciudadano debe presentar pruebas de que tiene la razón. Pero si el policía no se presenta a sustentar el caso, la persona tiene derecho a declararse inocente.

NECESIDAD DE ABOGADO. El abogado es uno de los asesores importantes que una persona debe tener en Estados Unidos, se requiere para múltiples actividades. Hay casos en que es obligatorio tenerlos para una defensa y si no hay dinero para pagar, el juez nombra un abogado de oficio. 

La mejor manera de contratar un abogado es pidiendo listas de referencia a la llamada Barra de Abogados que son organismos en cada estado y a veces en ciudadades, a los que están afiliados estos profesionales. Además, por ley, usted está en el derecho de pedir al abogado que va a contratar, que le entregue referencias de su profesionalismo y actividades para usted corroborarlas.

MULTAS. Una de las formas de castigo más comunes en este país son las multas. Son colocadas por policías, jueces y organismos y funcionarios del gobierno de diversos niveles, según el tipo de infracción. Negarse a pagarlas significa aumentar su valor y al final ser arrestado.

Las multas más comunes son las de tránsito.

FIANZAS. Los jueces, en la mayoría de los casos, fijan fianzas para que los individuos acusados de delitos gocen de libertad mientras llega su juicio. En muchos casos el depósito es tan sólo del 10%.


Existen organizaciones especializadas en manejar las fianzas. Para ellas se toman garantías, generalmente propiedades.

AYUDAS. Las Barras de Abogados, a que hemos hecho referencia, cuentan generalmente con departamentos dedicados a orientar a los ciudadanos en materia legal y a prestar ayuda gratis para las personas en capacidad de demostrar que no pueden pagar un abogado.

También las oficinas de defensa del consumidor a nivel nacional, estatal y local, ofrecen mucha ayuda.

Le recomendamos solicitar una lista de publicaciones legales gratis a:

U.S. DEPARTMENT OF JUSTICE

Publications

Washington, DC 20530.

CASOS Y COSAS DE JUAN LATINO.

Nunca he sido arrestado en Estados Unidos, gracias a Dios, pero he pasado algunos sustos. Uno de ellos fue el día en que un policía tocó la puerta de mi casa con un papel en la mano y una citación que me hizo firmar. En esa época yo no entendía mucho Inglés pero pude leer que se trataba de un asunto que no me correspondía. Tenía que responder por una deuda de U$30.000 con una empresa que ni conocía. El policía sólo me dijo que me presentara y aclarara.

Pero la cosa no fue tan sencilla, al final, sin tener que ver en el asunto, para demostrar que se trataba de otro Juan Latino, me tocó contratar a un abogado. Una injusticia pero así es cuando no sabes como defenderte por ti mismo.

Se me ocurre que Juanes hay millones, pero Juan Latino no deben ser muchos. Quizás algún día hasta me cambie el apellido por alguno sofisticado.

Hasta pronto.

JUAN LATINO.

 

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